17/3/13

Kon, lo nuevo de Jorge Araya

Una noche Jorge Araya, autor de Vilú, la renovación de los tiempos tuvo una epifanía, tenía que ver impreso una pesadilla que tuvo, que luego experimentó en su computador dígito a dígito y lo envió a mi casilla de correo electrónico. Lo leo y me encuentro con un texto en clave ciberchamánica. Muchos editores dirán a priori "una novela del estilo de Baradit, que poco original", pero me encontré con otra realidad. Toma elementos ciberchamánicos, presencia de entidades espirituales, conspiraciones intrincadas y elementos aborígenes con exuberante tecnología, pero inmerso en una nivola de misterios, con un detective privado a la antigua, intachable y con moral recta, no como todos los experimentos cinematográficos postmodernos, en donde el bueno es malo y el malo no es tan malo (típico del cine norteamericano post 11/IX).

El retorno de personajes con moral delimitada, la rectitud del detective González, y sobretodo, el largo viaje que el protagonista vive fueron los detonantes de que en pocos días haya dedicado muchas horas de trabajo de edición y discusión atricherada con el autor. Araya insistía en que el relato no debía alterarse, pero yo, como buen viajero le hice notar varios errores costumbristas y geográficos, asunto que al final se respetó, con el fin de que el libro sea parte de un catálogo editorial y no uno de tantos libros autoeditados del país. 

El trabajo que vino después es arduo, labores de traducción apoyados con la poetiza chilota Jessica Gallardo y el cinematógrafo Francisco Pérez, a esto sumado a mis memorias de múltiples viajes, que incluyen lugares y modismos que para los santiaguinos nos es desconocido, además de la gestión editorial es parte de la impronta de Kon. El equipo de trabajo, en comparación con las otras tres publicaciones de Chilenia, es muy pequeño. Apoyándome en la supervisión de Jorge Araya, y en momentos de duda existencial con Samir Muñoz, disecciono la novela a un punto de paranoia tremendo, porque soy el único responsable de la edición, y deseo firmemente avanzar en mis habilidades editoriales. Jorge Araya queda sorprendido por la velocidad de los eventos.

Kon es una nivola de misterios, a la usanza de los personajes de cine negro de la edad de oro de Estados Unidos, pero que transcurre en un poblado costero de la región de Atacama, y en varias otras ciudades del país. Y utiliza elementos ciberchamánicos para expresar la aberración, lo horroroso, pero no está inmerso en una realidad paralela ni futurista, todos los elementos del libro existen, y son parte de nuestra identidad nacional. 

Kon es la cuarta publicación de Biblioteca de Chilenia, con trabajo de portada de Pulo Contreras, del Estudio Mono de Tinta, prólogo de Martín Muñoz Kaiser, autor del llamativo libro El martillo del Pillán, y con una impronta muy personal, sin alterar el curso de las intuiciones y sinsabores del detective González.

10/3/13

Desventura, atasco, triunfal Villa Alemana


Emisor: Emiliano Navarrete
Categoría: Biblioteca de Chilenia
Fotografías cortesía de "Centro Cultural Crack Cómics!"

Teniendo los permisos laborales, las alianzas editoriales y los libros listos para partir a Villa Alemana me subo a la 210, bus que une el sector Sur-Oriente con el Nor-Poniente de la capital para bajar en Avenida Matta y caminar hasta Santa Rosa. Con ausencia de locomoción y paraderos en dicha arteria voy con mi característico e inmortal carrito azul hasta la esquina para llamar, desde un teléfono público, a Mapache Studios, quienes me traerían a Villa Alemana. En un conocida estación de servicios subo al mapachemovil y me aventuro a discutir sobre feminismo, música exótica y cómic americano. Todo iba bien hasta que aparece Carabineros de Chile, cursan un parte a un Mapache por ir en exceso de velocidad y lo citan al juzgado de Curacaví. La nota triste de la jornada.

Pero el viaje sigue, y luego de un par de chistes llegamos a Lo Vásquez, para ir por Camino Lo Orozco hasta nuestro destino. Entonces, nos encontramos con la sorpresa de que estaban remodelando el camino, obligándonos a viajar a 40kmph con largas pausas y detenciones. Y así, llegamos una hora tarde llegamos al evento.

Rápido, a izar la bandera, montar el local, hacer la charla con amigos y colegas. El buen día lo crea uno, y Chilenia ya estaba instalado para ofrecer su cuota de lecturas inesperadas. Admito que mi colega estaba muy nervioso por el escenario extraño en que lo invité a exponer. Eliminamos varios mitos sobre copyleft y copyright, con múltiples ejemplos usados, desde el Colectivo Mutante Clandestinos hasta las polémicas de los comerciales de Retail. Ya con el viento a favor, a todo velocidad y sin leyes que nos detuvieran, comenzó la excelente recepción del libro de Gonzalo Fernández, "Narraciones extravagantes", que atrae a un público heterogéneo y desmedido. Algo de hipnótica tendrá la colección de cuentos, porque he visto ya demasiada gente sumergirse para no volver. Y por último, se sumaron las muchas anécdotas divertidas, secretos que solo se cuentan en vivo y en directo.

Éste es el resumen de una buena alianza con diversas editoriales, que en este caso fue Libros de Nébula, y de nuestra férrea voluntad de llevar lo mejor del arte de diversas ciudades del país, a los rincones más rebuscados. Extendiendo fronteras, "fundando de infinito los confines".

Muchas gracias por sus saludos y sus parabienes. Pronto sabrán de nuevos viajes que hago por el país.